La fotografía gastronómica es tan antigua como la propia fotografía; diferentes frutas como la piña o melocotones fueron algunos de los primeros sujetos de los daguerrotipos. En el siglo XX, el auge de las revistas gastronómicas, los libros de cocina y, finalmente, los blogs de comida, supuso que las fotos de platos deliciosos se multiplicaron.
Las fotos de comida ayudan a los minoristas de ecommerce a construir marcas y aumentar sus ventas. Una tentadora imagen de una focaccia con una ramita de romero encima puede promocionar de manera efectiva una botella de aceite de oliva, mientras que un humeante tazón de fideos yakisoba puede aumentar el atractivo de un condimento de un chili.
Entonces, ¿cómo tomar fotos de comida que abran el apetito? En lo que refiere al material, aunque una cámara DSLR profesional o sin espejo puede ayudar, un equipo caro no es imprescindible. Ya seas un comercializador, emprendedor, dueño de un pequeño negocio o amante de la gastronomía, puedes seguir los fundamentos de fotografía que te presentamos a continuación para tomar fotos de comida cautivadoras.
Cómo tomar fotos de comida
Tomar fotos de comida buenas es mucho más que apuntar y disparar. Ya estés generando instantáneas simples con tu teléfono o seas un fotógrafo profesional tomando fotos de alta calidad con una cámara sofisticada, hay que aplicar ciertos principios básicos:
1. Elige un fondo
Selecciona una superficie complementaria que centre la atención en la comida. Por ejemplo, un papel de fondo sin costuras hace que el espectador se centre directamente en el sujeto de la fotografía. Estilizar la comida con vajilla, manteles y otros elementos de decoración puede educar a nuevos clientes sobre tu marca y los productos comestibles que ofreces.
Por ejemplo, la empresa de aperitivos sin alcohol Ghia fotografió su bebida en una copa sin tallo contra un fondo blanco. “Queríamos hacer una copa que pareciese lujosa, pero también muy accesible,” dice la fundadora Melanie Masarin en el podcast Shopify Masters.
2. Ajusta la iluminación
La iluminación puede realzar las texturas de la comida, marcar el ambiente y prevenir sombras no deseadas. La luz suave añade una iluminación uniforme, mientras que la luz dura puede crear sombras marcadas. Usa una fuente de luz grande y suave como una ventana con cristal esmerilado o un softbox (un tipo de modificador de luz común) para evitar sombras. También puedes fotografiar la comida al aire libre para aprovechar la luz natural.
Por ejemplo, esta foto de la receta de filete y huevos con chimichurri de la marca de aceite de oliva Graza emplea luz natural desde un ángulo para resaltar el plato terminado.
Ciertos alimentos se benefician de diferentes direcciones de luz durante una sesión de fotos. La iluminación desde arriba funciona mejor en platos de comida o decoraciones de mesa. La iluminación frontal está bien para las publicaciones en redes sociales, y la iluminación desde un lado puede agregar dramatismo a ingredientes o productos individuales.
3. Diseña la toma
Hay demasiados elementos que pueden desviar la atención de la comida. Si bien colocar el plato principal en el centro de la toma puede parecer natural, no siempre produce la imagen más atractiva. Sigue la regla de los tercios y divide el encuadre en tres secciones iguales, tanto horizontal como verticalmente. Después, coloca el sujeto principal en una zona de la cuadrícula para atraer la atención del espectador.
Puede haber tantos ángulos como platos, por lo que es importante encontrar el mejor ángulo para tu comida. Por ejemplo, echa un vistazo a esta toma lateral de un trozo del esponjoso pastel de algodón de azúcar en la que se muestran las coloridas capas del pastel.
4. Estabiliza la cámara
Coloca la cámara en un trípode o soporte para evitar que la cámara se mueva y saques fotos borrosas. La claridad y el enfoque son especialmente importantes para los alimentos con texturas interesantes, como unos pastelitos espolvoreados con azúcar glass, o un pedazo de tofu frito con una costra crujiente. Usa un trípode con rótula de cremallera —como el Manfrotto 405— para ajustar con precisión la inclinación y la panorámica. Con un soporte de cámara podrás además hacer fotos desde distintos ángulos, ya que puedes moverla en vertical y horizontal.
Por ejemplo, Fly by Jing, una tienda online de productos alimentarios procedentes de la región de SIchuan, destaca los diversos colores y texturas de los alimentos en esta toma cenital con la que promociona su kit para hot pot. Los fotógrafos de alimentos a menudo utilizan estructuras aéreas o brazos de grúa para estabilizar las cámaras para tomas cenitales como esta.
¿Cómo tomar fotos de comida perfectas? 5 consejos
- Experimenta con los objetivos
- Juega con los filtros y modificadores de luz
- Practica el apilamiento de enfoque
- Usa un comprobador de color
- Supervisa tus imágenes
Para las grandes marcas, la fotografía gastronómica involucra a todo un equipo creativo que suele incluir un director de arte, estilista de alimentos y el resto de objetos de la foto, fotógrafo de alimentos y técnico digital. Sin embargo, los comerciantes y dueños de pequeños negocios a menudo deben desempeñar todos estos roles ellos mismos. Ten en cuenta los siguientes consejos para tomar mejores fotos de comida:
1. Experimenta con los objetivos
Dependiendo del objetivo que utilices, puedes cambiar la apariencia de la imagen. Los objetivos macro tienen una longitud focal más larga y una relación de magnificación más alta en comparación con los objetivos normales, por lo que son perfectos para tomas en primer plano. Son además especialmente útiles para resaltar detalles como un ingrediente específico o una textura interesante.
Los objetivos angulares, como el Laowa 24mm F14 2x Macro Probe EF, tienen un tubo largo y delgado que permite fotografiar ángulos que de otro modo serían imposibles. Por ejemplo, puedes pasarlo a través de pequeñas aberturas, como el agujero de un dónut.
2. Juega con los filtros y modificadores de luz
Suaviza cualquier fuente de luz añadiendo capas de difusión entre la fuente y el set. Los fotógrafos profesionales utilizan filtros de difusión como el Opal Frost de LEE Filters, pero en un apuro, una sábana también puede funcionar.
Para añadir interés visual, puedes usar un filtro North Star, que agrega múltiples rayos de luz desde una fuente puntual. Así conseguirás crear un efecto deslumbrante en un vaso de cóctel o una vela. También puedes usar modificadores de luz como reflectores o paneles de abeja para eliminar la luz o difuminarla en ciertas áreas.
3. Practica el apilamiento de enfoque
El apilamiento de enfoque es una técnica digital para combinar múltiples imágenes con diferentes áreas enfocadas y obtener un compuesto con detalles mejorados. El apilamiento de enfoque puede ser útil en la fotografía gastronómica macro, especialmente para primeros planos donde no es posible enfocar todos los elementos en una sola captura.
Las cámaras profesionales tienen sensores grandes y una profundidad de campo baja para facilitar esta función. Quienes utilicen la cámara del móvil pueden intentarlo con aplicaciones de apilamiento de enfoque como FocusStacker en iOS.
4. Usa un comprobador de color
Los colores apetitosos son especialmente importantes al tomar fotos de comida, pero pueden ser difíciles de lograr. Un comprobador de color, como el X-Rite ColorChecker Passport, es una herramienta que se parece a una paleta de sombras con pequeños cuadrados de colores, cada uno con un valor calibrado y medible.
Cuando lo colocas en una foto, puede ser muy útil para asegurar la precisión del color más tarde en el proceso de edición, manteniendo los alimentos lo más fieles posible a la realidad. X-Rite ofrece un complemento para Capture One y Adobe Lightroom que lee los parches de color para calibrar tu cámara para una representación fiel.
5. Supervisa tus imágenes
Conecta tu cámara a un ordenador por USB para tener una pantalla más grande y revisar tu trabajo mientras tomas fotos. Algunos programas como Adobe Lightroom o Capture One son compatibles con las principales marcas de cámaras. Estos programas también transfieren tus imágenes directamente a tu ordenador, eliminando la necesidad de importarlas después de la sesión o llenar las tarjetas de memoria. Ver tus imágenes de inmediato en una pantalla más grande te permitirá detectar problemas y corregirlos al instante.
¿Cómo tomar fotos de comida con la configuración adecuada?
Al controlar la apertura, velocidad de obturación, ISO y balance de blancos, el modo manual permite obtener tomas consistentes. Si no usas una cámara DSLR, aplicaciones como Halide pueden ayudarte a controlar algunas de estas configuraciones en tu teléfono.
Apertura
La apertura controla la cantidad de luz que llega al sensor al abrir y cerrar el anillo de apertura de tu objetivo. Una apertura más amplia, que permite que entre más luz, tiene un valor F más bajo (la relación de la longitud focal al ancho de la apertura).
El valor F tiene un impacto significativo en tu profundidad de campo, es decir, que afecta al enfoque del primer plano y el fondo. Cuanto más alto sea el valor de apertura, mayor será la profundidad de campo. Una apertura baja, como f/2,8, corresponde a una apertura amplia y produce una profundidad de campo muy superficial. Una apertura alta, como f/22, tiene una profundidad de campo mucho mayor.
Cuanto mayor sea la apertura (es decir, cuanto más aumentes tu número F), más enfocados estarán el primer plano y el fondo. Sin embargo, debido al fenómeno de difracción (cuando las ondas de luz se doblan al pasar por tu lente), los pequeños detalles se volverán menos nítidos.
Para la fotografía gastronómica con una DSLR de fotograma completo, una apertura intermedia, como el f/11, producirá las fotos más nítidas, ofreciendo un equilibrio entre un primer plano y fondo claros y detalles nítidos.
Velocidad de obturación
La velocidad de obturación es la cantidad de tiempo que el sensor de la cámara está expuesto a la luz. Una velocidad de obturación más lenta, como 1/15 de segundo, permite más luz, pero desenfocará cualquier movimiento que intentes capturar. Cuando uses luz natural, necesitarás utilizar una velocidad de obturación más lenta. Una velocidad de obturación más rápida, como 1/1.000 de segundo, congelará cualquier movimiento en el encuadre.
Esto funciona mejor para fotos en las que se produce una acción, como verter una bebida en un vaso o mostrar las burbujas en una bebida carbonatada.
Revisa el manual para conocer la velocidad de sincronización del flash de la cámara. Un valor de 1/200 de segundo es común. Una velocidad de obturación más rápida reducirá la cantidad de luz ambiental (como la procedente de la luz del techo o de una ventana) que llega a tu foto. Usar flash para tomar fotos de comida permite bloquear la mayor cantidad posible de luz ambiental y así maximizar el control sobre la forma y dirección de la luz.
ISO
La configuración de ISO ajusta la sensibilidad del sensor de tu cámara a la luz. Un valor ISO bajo, como 100, permite la menor cantidad de luz y produce la menor cantidad de ruido visual, lo que lo hace ideal para escenas al aire libre bien iluminadas y con flash. En las fotos, el ruido visual se ve como unas manchas aleatorias descoloridas, por lo que puede arruinar cómo se ven los colores y las sombras profundas.
Un valor más alto, como 3.200, es más sensible a la luz, pero produce más ruido visual. Para la fotografía gastronómica, es mejor usar el valor más bajo que puedas para la cantidad de luz que necesitas. Revisa el manual de tu cámara para conocer el ISO nativo (que suele estar entre 100 y 200), ya que esto ofrecerá la mejor calidad.
Balance de blancos
Las diferentes fuentes de luz tienen valores de balance de blancos variados, que se miden de cálido a frío en una escala llamada Kelvin. Por ejemplo, una bombilla incandescente tiene un valor de 2.700 K, emitiendo un brillo cálido, mientras que la luz natural en un día nublado puede tener un valor de alrededor de 6.000 K, que una cámara percibe como más fría en tono. Puedes encontrar el balance de blancos que mejor funcione para tu escena en los elementos del menú de tu cámara.
Evita mezclar luces cálidas y frías al componer tu escena, ya que esto será difícil de equilibrar en el programa de edición de fotos. Si planeas usar luz diurna o flash, apaga cualquier iluminación artificial.
Preguntas frecuentes sobre cómo tomar fotos de comida
¿Cómo puedes tomar buenas fotos de comida?
Hay tres pasos esenciales para tomar fotos de comida espectaculares. Coloca tu alimento o producto de manera estética, encuentra una hermosa luz natural y coloca la cámara en un trípode estable.
¿Cómo puedes tomar fotos de comida sin sombras?
Para prevenir sombras al fotografiar comida, evita la luz solar directa y posiciona una gran fuente de luz cerca del sujeto. Tomar fotos al aire libre a la sombra o cerca de una ventana con poca luz dará los mejores resultados, convirtiendo las fotos en tomas excelentes.
¿Qué configuraciones de cámara debo usar para la fotografía gastronómica?
Para la fotografía gastronómica, utiliza un ISO bajo para minimizar el ruido visual y una apertura intermedia como f/11 para una amplia profundidad de campo y máxima nitidez. La velocidad de obturación dependerá de la cantidad de luz en tu escena. Toma tus fotos de comida en formato RAW para obtener una máxima flexibilidad durante el proceso de edición.