La imagen del emprendedor necesita un cambio rotundo

Los jóvenes son más inteligentes

Esto es lo que afirmó Mark Zuckerberg en un evento llevado a cabo en la escuela de startups Y Combinator en el año 2007, en presencia de 650 aspirantes a emprendedores.

Su lógica era sencilla: los jóvenes tienen una vida más tranquila, por lo que son capaces de enfocarse en problemas más complejos.

Ahora que Zuckerberg tiene más de treinta años, no estoy seguro de que sostenga la misma idea; de hecho, estoy seguro de que no lo hace.

Pero esta idea sigue presente.

✅ Silicon Valley sigue idolatrando a la juventud, y es probable que muchos vean a Zuckerberg, de 22 años, como el arquetipo de un fundador.

Los estudios corroboran que mucha gente considera que los jóvenes emprendedores tienen más empuje y mayor capacidad para responder a grandes exigencias.

En lo referente al género, la clase socioeconómica y la etnia, la mayoría de los emprendedores no se asemeja en nada al estereotipo de los jóvenes a los que Zuckerberg hace alusión.

No se trata únicamente de un problema de imagen; este estereotipo tiene profundas consecuencias económicas y sociales que van en aumento.

Hoy en día, hay segmentos enteros de la población que siguen descartando el emprendimiento por considerarlo como un camino profesional exclusivo para una élite.

Un mito que se perpetúa con los estereotipos sobre los fundadores jóvenes, blancos y masculinos.

Hay que poner un punto final a esto, ahora mismo.

La importancia de la diversidad entre los emprendedores

En la actualidad, la naturaleza del trabajo está cambiando.

Los avances tecnológicos transforman el funcionamiento de las industrias y, por consiguiente, las oportunidades de empleo a largo plazo en una empresa son cada vez menos frecuentes.

Algunas organizaciones intentan facilitar el proceso de adaptación de los trabajadores.

En la mayoría de los casos, la responsabilidad recae sobre cada empleado, que tiene que descubrir cómo puede integrarse en este nuevo entorno.

La cuestión es que la sociedad presenta demasiados problemas y necesitamos, ahora más que nunca, gente que encuentre la forma de solucionarlos.

La tecnología puede haber dificultado el desarrollo de una carrera profesional tradicional, también ha disminuido las barreras de acceso para iniciar un negocio

✅ Las herramientas y plataformas como Shopify, Kickstarter y PayPal simplifican más que nunca la creación y el crecimiento de negocios a las personas con recursos limitados que no disponen de grandes cantidades de capital.

Es un fuerte contraste con la realidad que vivieron mi padre y mi abuela.

Ellos tuvieron que recurrir a una segunda hipoteca sobre sus casas para financiar sus negocios minoristas.

Ahora bien, la innovación no puede provenir de un pensamiento homogéneo y casi nunca surge entre personas que están cortadas por la misma tijera.

Mientras Silicon Valley sigue luchando para rectificar su falta de diversidad, tanto en lo que respecta a su mano de obra como a los productos que fabrica, seguimos siendo testigos del surgimiento de oleadas continuas de negocios idénticos.

→ Tanto si se trata de aplicaciones para compartir fotos o para la meditación, estos productos apuntan al mismo mercado, ofrecen soluciones similares y por lo general no aportan nada significativo en lo que respecta a los principales problemas del mundo...

La diversidad en los equipos genera mejores negocios.

No es mi opinión, es un hecho empírico...

Y los emprendedores pueden beneficiarse intercambiando ideas con fundadores que tienen perfiles totalmente diferentes que no piensan como ellos.

De este modo, se verán expuestos a ideas distintas, lo que les permitirá empatizar con un espectro más amplio de clientes.

Además, en un círculo virtuoso, mientras más empatía tengas con los clientes, más se afianzarán tus productos.

¿Cómo revertir la imagen del emprendedor?

Para que haya diversidad es necesario renovar el concepto de emprendedor.

Si detectas oportunidades y descubres formas creativas de solucionar problemas, eres un emprendedor, más allá de la edad que tengas o de tu formación.

Es fundamental que quienes aspiran a ser emprendedores se identifiquen como tales. El simple hecho de definirse como emprendedor puede ser un factor determinante.

Soy testigo directo de esta realidad.

Mi esposa, Lindsay, es una emprendedora que ha logrado tener éxito con un negocio de venta minorista, pero en un principio se identificaba primero como mamá y después como propietaria de un negocio.

Para convencerla de lo contrario, le propuse que hiciera una prueba. Le recomendé que modificara todos sus perfiles en las redes sociales e incluyera la palabra "emprendedora".

A partir de ese momento, la gente comenzó a contactarla para hablar de negocios.

En cuanto se apropió de esa palabra, se abrió un mundo de nuevas conexiones y oportunidades que le permitieron avanzar en su negocio.

La importancia de retribuir tu éxito

Quienes ya han alcanzado el éxito como emprendedores tienen una obligación no menos importante: retribuirlo.

El espíritu emprendedor es un oficio, una trayectoria profesional única basada en la tutoría y las relaciones personales. Por eso es esencial hacer extensivo ese apoyo y esa tutoría a personas de entornos diversos y a veces relegados.

✅ Los emprendedores son los auténticos solucionadores de los problemas del mundo.

Por eso, es hora de que apliquemos nuestras herramientas, métodos y recursos para resolver un problema crucial en nuestra comunidad y logremos redefinir lo que significa ser un emprendedor.

Tanto las mujeres como los inmigrantes y las personas de las más diversas edades y razas están aportando una valiosa contribución como emprendedores y reformulando los estereotipos obsoletos.

Cuanto antes se ajusten nuestras percepciones a esa realidad, tanto mejor será nuestro futuro en común.

Harley Finkelstein es emprendedor, abogado y presidente de Shopify. Este artículo se publicó por primera vez en Fast Company.

Ilustración de Islenia Milien